Es sentir que comienza tu estación favorita. Sonreír. Una melodía
perfecta en el momento adecuado. La brisa de la noche. Vivir. Subirse al tren Destino de su mano.
Es sentir que te mira. Y no poder negar que te gustan sus
ojos te invita a sonreír. Y después ver que también él sonríe.
Es sentir que
estás realmente perdida. Porque te has enamorado. Es sentirse bien, viva.
Libre. Sentir que te acarician mariposas. Que empiezas a volar y ya nada te
detiene. Es sentir que no van a haber más aterrizajes forzosos. No a su lado.
Son besos en tu cuello en medio de la madrugada. Tímidas caricias en la espalda. Es sentir que te pierdes en sus brazos. El roce de su piel.
El sonido de su voz. Sus susurros. Sus palabras. Sus manías. Es sentir que ya
no puedes vivir sin él. Descubrir que ya no puedes dormir sin escuchar el
latido de su corazón. Que las únicas pesadillas que tienes son siempre
perderle. Es despertar y verle dormido a tu lado. Y es sentirse tan feliz que
sobran las palabras.
Es buscar unos buenos días mi princesita linda. Es
encontrarlo. Es no saber cómo agradecerle todo. Es hacer tonterías juntos. Ser unos niños que juegan a amarse de verdad.
Es tu inspiración. Las ganas de marcharse a otro mundo en el que nadie pueda
alterar ese delicado y perfecto equilibrio. Es sentirse tan bien que no quieres
dejarlo escapar. Sentirse segura pensando que puedes contar con él siempre. Es
despertarse de madrugada para hacer alguna locura. Desayunar a su lado. Tener
proyectos y expectativas y ver que se cumplen poco a poco con amor. Siempre con
amor.
También es estar celosa en algún momento, aunque sabes que
su mirada sólo te pertenece a ti. Es no tener un buen día. Discutir de vez en
cuando. Encontrar siempre la mejor solución juntos. Cumplir las promesas y
creer todavía en los “para siempre”. Es esforzarse para que no se quede en
nada. Es pensar que sois unos perfectos soñadores que desean estar juntos un
infinito y medio. Es tener ganas de seguir adelante. Juntos. Y ser ancianos y
reordenar buenos recuerdos y decir “Ya te dije que serías el amor de mi vida”.
Sencillamente es estar con él. Es llamarle amor. Es decirle
te amo. Es decirle gracias. Es cogerle de la mano y empezar una vida. Nuestra
vida.



Que bonito es el amor, yo tengo la suerte de estar enamorada y ahora estamos más simpáticos y cariñosos. Es tan cierta y bonita la entrada.
ResponderEliminarMuchos besitos desde http://queenofyourdreams.blogspot.com.es/ ♥
Es una suerte estar enamorada de una persona que siente lo mismo :)
ResponderEliminarMuchas gracias por comentar. Muchos besos preciosa^^